Nos despedimos de Sepahua, yo salí con un nudo en la garganta.
Rio Urubamba arriba llegamos hasta la comunidad indígena de Kirigeti, donde nod recibe el padre David y dos cooperantes David y Ana que se han pedido excedencia para pasar allí un año (que envidia), charlamos, nos enseñan la comunidad, el padre David nos anima a que visitemos al padre Ricardo en Lima para hablar sobre Sepahua.
Tras un rato con ellos volvemos a la barca, el motor se para en algunos tramos e incluso tenemos que caminar por la playa. A las 5 llegamos al albergue de Limpia, es muy , pero que muy bonito y nos atienden muy bien.
A la mañana siguiente con otra barca y otro motor más bajo que no pegue en el fondo salimos hacia le Pongo de Mainique, ni las palabras ni las fotos pueden describir bien esto. El Urubamba se estrecha y caen al rio cataratas desde la selva.
Nuestro viaje fluvial acaba en Ivochote, allí agarramos una combi que nos llevará a Quillabamba. No hay carretera, es una pista forestal (y soy generoso con el término) curvas de vertigo,precipicios… Lo peor son los pinchazos y las averias que nos retrasan haciendonos perder el bus de Cusco. En las continuas paradas conocemos a gente que vive literalmente en medio del camino, aquí la pobreza es mayor que en Sepahua, los niños no estan tan alegres, agradecen los caramelos,alguno incluso chupa el papel.
Algunas paradas son por los motivos mas raros como matar una culebra que se atraviesa en elcamino para evitar la mala suerte… Viajamos 18 personas en una combi de esas q usan los fruteros para llevar su mercancía, pero acondicionada con asientos, los peruanos parece que van hasta comodos pero los españoles vamos descoyuntados, je, je ahora que ha pasado me rio.
Mañana esperamos estar en Cusco
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